lunes, 27 de abril de 2020



El juguete estaba debajo de la cama. Llevaba poco tiempo en esa casa, pero sabía que aquel era un buen escondite, perfectamente situado para salir a explorar cuando las personas desaparecían.

Pero algo estaba cambiando ahí fuera. Aunque no entendía bien el lenguaje humano, sospechaba que tenía que ver con ese tal coronavirus que tanto mencionaban.
Esperó y esperó...hasta que se quedó sin pilas


El de mi hermana:

El juguete estaba debajo de la cama ayer cuando me acosté. Hoy no está pero hay una nota "Gracias por devolverme mi osito, hacía años que no lo veía". Vivo sola.

No hay comentarios:

Publicar un comentario